Hace
más o menos un mes vi Plan 9 del espacio exterior, película
de ciencia ficción que tenía pendiente desde hacía bastante
tiempo. Sabía que el metraje me gustaría, pero lo que no supe
prever es que el cine de Ed Wood se convertiría en casi una obsesión
para mi. Así pues, las semanas subsiguientes al fatídico hecho
he podido disfrutar de gran parte de la producción que circula por
Internet de este cineasta. En parte fue motivada por este hecho por
lo que deseé encontrar y leer algo que despertara
en mi el mismo grado de fascinación que esas maravillosas películas
que nos legó el señor Edward Wood Jr. Y para mi la
respuesta a esa necesidad literaria fue el bizarro.
Uno
de los motivos de que escogiera Cuarto acercamiento al
ovni para iniciarme en el bizarro fue porque había visto muy
buenas opiniones respecto a la prosa bizarra de Tamara Romero. Entonces me
dije: “¿Y por qué no entrar en este género con ella?”. Además leí por encima una novela corta disponible en su página web
que me predispuso a no observar sus historias con el recelo usual con
el que analizo la mayoría de la literatura de este siglo. Creo que
desde el preciso instante en el que me cercioré que en las historias
de Tamara Romero podía encontrar algo de lo que mi mente demandaba a
gritos, acepté la prosa de la autora como una puerta hacia una
dimensión desconocida en la que podría acariciar los
últimos vestigios de convertir
sueños imposibles en ficciones maravillosas. Y, la verdad, sentirme
en consonancia con los textos de una autora que no está muerta es
bastante agradable.
En
esta antología hay relatos de lo más variopintos, para mi uno de los puntos más positivos de la selección. Como yo no sé de qué manera se suelen acercar los lectores al bizarro voy a
decir que, bajo mi criterio, esta antología supone un grato
acercamiento que no dejará indiferente a los que busquen literatura contracultural muy gamberra. Tras terminarla y reflexionar sobre ello he
podido comprobar que el bizarro toma de verdad barreras
estéticas, morales y literarias, juega con ellas hasta dominarlas para utilizarlas a su antojo, y es algo que me fascina. Para mi es, además, un género que funciona perfectamente en ambientes de lo más
dispares y bajo atmósferas muy distintas. Un género tal vez más presente en el tono de una historia que en los elementos en si, que ojo, no digo que esos elementos carezcan de importancia en el bizarro.
Según lo veo yo, la importancia de éstos en una historia
bizarra reside con mayor fuerza en la disposición y en la presentación de ese elemento. Pienso que los lectores usualmente solemos dar más importancia al elemento en sí que a la forma en la que se nos sugiere, un aspecto que por lo menos en mi caso siempre he tomado como algo más secundario (que esto también depende de los criterios y gustos de cada quién, claro). En
la weird fiction o ficción extraña, por hablar de un
género que también busca esa fascinación en lo extraño (aunque de
manera diferente al bizarro), las historias están sujetas a otras leyes, se busca presentar elementos "complejos" al entendimiento humano. La aparición de esos elementos alejados de lo cotidiano son los que en gran medida intentan cerrar una de estas atmósferas e intentan despertar como buenamente pueden una serie de sentimientos y sensaciones en el
lector. Pero bueno, a lo que voy es que todas las historias weird que
he leído se demandan a si mismas una serie de requisitos que las llevan a amoldarse a unos estándares mucho más tradicionales, tal vez porque su origen es bastante previo el bizarro y fue bajo otras condiciones. Pero el bizarro la ventaja que tiene es que se pasa por el forro los límites, y es lo fascinante, porque es lo que para mi da al género un potencial inconmensurable.
En
el primer relato de la antología, Sabia serpiente, somos partícipes de
un hecho un tanto sórdido: alguien le ha vuelto a enviar a Vívica
Philo un ramo de flores murciélago, elección floral un tanto
extraña desde luego, el problema es que es el tercer ramo en lo que
va de mes y otro tipo de presentes menos estrafalarios y preocupantes han llegado a sus manos. El relato, que en parte gira en
torno al descubrimiento de quién es este stalker, me
pareció bastante entretenido cuando lo leí, pero poco más. El caso
es que conforme han avanzado los días y he ido pensando en Sabia
serpiente de vez en cuando he sentido que mi opinión
cambiaba lo suficiente como para valorar otra puntuación. A pesar de
lo escabroso que resulta el tema principal del relato, la atmósfera, la
situación y los personajes me transmitieron bastante cercanía en una segunda lectura, y para
mi empatizar con una historia y sus personajes sabéis es crucial, y este relato lo logra. Una buena narración, sin lugar a dudas.
El
siguiente relato es el que da nombre a la antología, Cuarto
acercamiento al ovni, mucho más largo y más trabajado que Sabia
serpiente, aunque los dos me gustaron prácticamente igual.
El tema es que llega una nave alienígena a la Tierra, y tras
sobrepasar las medidas de seguridad reglamentarias para la especie
humana y las presentaciones interplanetarias pertinentes, un grupo de
escritores de ciencia ficción son invitados a charlar con la
representante alienígena en la nave para establecer
relaciones más estrechas entre especies. Se trata de un relato muy
curioso, imaginativo a rabiar. Objetivamente es el mejor de la
antología por abordar en él distintas cuestiones, entre las más
importantes la referida al género, aunque también los aspectos
sociales y literarios son bastante relevantes. Lo que
más me disfruté del relato fue la sociedad alienígena que nos
describe Tamara a través de Norma Bento y el final, muy inquietante.
El
tercer relato, El aeropuerto en el fin del mundo, fue un
goce para los sentidos porque me dio bastante para pensar. Como el
título indica, estamos ante los últimos días de la Tierra tal y
como la conocemos. La joven protagonista va a pasar sus últimos días
de vida con su novio antes de que un meteorito mande a la humanidad
al cenagal de donde no debió de haber salido. Como el novio reside
por razones de trabajo en otro país decide coger un vuelo y pasar
sus últimos días junto a él en una cabaña perdida en Fortaleza.
Pero en el aeropuerto, poco antes de embarcar, empiezan a suceder
cosas muy muy rocambolescas. Me gustó bastante como la autora lleva el tema
apocalíptico en esta historia, una temática que volverá a repetir
en el último relato de la antología, Empieza por Z.
Este ¿género? no es el que más disfruto, de hecho, no siento un
ápice de interés por este tipo de historias, pero la atmósfera
inquietante, la imagen de ese aeropuerto que intenta conservar la
normalidad administrativa, las monjas con hábitos marrones que se
pasean por allí e incluso los comportamientos que la protagonista
desarrolla tras ciertos contactos en esa atmósfera fueron una
combinación absolutamente maravillosa que me metió de pleno en la
historia. Sin duda, no es un relato que resulte fácil de olvidar, y
mi favorito después de Empieza por Z.
Modelo
ajedrecista, Pantocrator y Cabalatrix ha
abandonado el edificio fueron para mi los más flojos de la
antología. ¿Resultan interesantes? Sí. ¿Imaginativos? Mucho. Pero
tanto el conflicto principal como la resolución me dejaron bastante
fría en los tres casos. Si tuviera que elegir entre los tres me
quedaba con Modelo ajedrecista porque aunque no me
despertó mucho entusiasmo en mi si que me pareció muy curiosa esa
peculiar congregación con la que se topa la protagonista a horas
intempestivas de la noche. ¡No dormir es la mayor ventaja de la
existencia! Pantocrator me pareció una historia
curiosa, muy estilo a un creepypasta que circuló hace unos años por
Internet sobre una artista japonesa que tras terminar una pintura se
suicidó. Es un cuadro perfecto que presenta el rostro de una joven
asiática con la supuesta pecurialidad si lo miras durante cierto
tiempo parece que cambia. El relato ya digo, me pareció curioso pero
no me despertó ningún entusiasmo. Por último con Calatrix
ha abandonado el edificio me sucede lo mismo que
con Pantocrator. Me parece un relato interesante, el
tratamiento del tema cyborg muy bien llevado, pero para mi no llegó
a cuajar. Igualmente los tres relatos me parecen muy por encima del
nivel que lo que yo suelo exigir a cualquier relato.
Y Empieza
por Z, que para mi es el mejor porque: es pura fantasía, hay
monjas que están bastante mal de lo suyo y hay catapultas tirando
mierda todavía humana, creo. El relato trata
sobre eso prácticamente, monjas de clausura que están bajo unas condiciones
físicas muy especiales y que viven en el convento de las Histéricas
(es genial esta autora, en serio) al margen de una sociedad que las
odia por ser como son, y ellas les tiran mierda en catapultas para defenderse. He de admitir que fue aquí cuando decidí que me
leería hasta las listas de la compra de Tamara Romero, porque vamos, ¡qué maravilla! Es un relato
que aunque no tiene la principal intención de inspirar ternura a mi fue lo que más me generó, en
especial la hermana Celeste con sus zetas maníacas. Solo por este
relato merece la pena lo que vale en físico y en digital la antología.
En
conclusión, Cuarto
acercamiento al ovni es
una antología de relatos interesantísima que acuchilla el corazón
amortajado de los freaks que vivimos en subsuelo. Tamara Romero domina sus narraciones y los elementos que la
integran, crea ese tipo de historias peculiares y especiales que solo
cobran verdadera vida bajo el influjo de un poder que a la mayoría
de mortales-lectores nos es desconocido. Creo, y lo digo con todo mi corazón,
que estas historias no serían ni la mitad de buenas si no las
hubiese escrito ella.
Nos vemos 💜.
¡Hola!
ResponderEliminarLlevo tiempo con ganas de leer a Tamara Romero y también con ganas de adentrarme en el género bizarro. Me gusta mucho lo que dices del género, que pase totalmente de los límites. Me he descargado ese relato que tiene en su web, 'Tiburón piñata' y espero animarme pronto a leerlo. De todas formas, espero poder hacerme pronto con esta antología, me has dejado con ganas de leerla. El relato que más me atrae a simple vista es 'Empieza por Z', tiene muy buena pinta.
Un beso
Y es que además el precio de sus libros en digital es irrisorio. Espero que la leas pronto y me cuentes qué te ha parecido querida Isa.
EliminarUn beso.
¡Holiii! ^3^
ResponderEliminar¡¿En serio?! ¡Tus propios dibujos! Tus propias fotografías y ediciones. Se agradece leer entradas que muestren tanto trabajo. El contenido de las entradas dejó de sorprenderme porque siempre nos has mostrado una gran calidad (bueno, más o menos). *_* :P
Mi imaginación ni puede acercarse a lo que cuentas sobre los relatos. O___O ¡El tema de las monjas me llamó mucho la atención! Realmente todo me llamó la atención, me resulta tan... tan extraño. Creo que sería una gran experiencia si decidiera leerlo... No me importaría buscarlo ahora mismo, pero me susurran en el oído que no tengo tiempo. xD
Ay, prosa bizarra. Estoy preparada (?) :) <333
Vuelvo a decir que la imagen que has incluido en la entrada me dejó en blanco.
¡Maravillosa!
Un besito. :*